Buenas personas que se aíslan del resto

Caminamos entre personas malvadas todos los días, narcisistas y psicópatas a quienes no les importa en lo mas mínimo dañar a otros para lograr sus más ruines y egoístas objetivos, más al contrario, muchas veces incluso disfrutan de tales actos de bajeza moral. 

Tristemente muchas personas buenas y sensibles acabamos aislándonos de nuestras respectivas comunidades como forma de protección ante un mundo que percibimos como hostil. Cuando alguien no quiere luchar debe huir, y no siempre se trata de cobardes como muchos creen, sino que muchas veces son personas que tienen cosas de mayor provecho a lo que dedicar su tiempo y energía, o son personas también que ya están agotadas de luchar por boberías y necesitan recuperarse de tanto desgaste innecesario.

Una vez, alguien me dijo, que los fumadores lo son por tener una mente débil. Yo no estoy de acuerdo, y así se lo hice saber. Según su teoría, una persona fuerte, debe tener el poder de dejar ese vicio cuando así lo decida. Muchos podrán compartir su opinión. Yo también, pero con un importante matiz. Creo que todos somos personas fuertes en potencia. Una mente fuerte puede estar debilitada por muchos factores internos y externos. No podemos simplificar a los individuos como débiles o fuertes tan a la ligera. 

Las personas tenemos grandes posibilidades escondidas dentro de nosotros, talentos y dones naturales que están deseando salir fuera y expresarse en este mundo físico, pero tenemos demasiadas piedras en el camino, piedras que pesan como losas, obstáculos que no nos sentimos capaces de superar. El entorno, desgraciadamente, y por regla general, en lugar de ayudarnos a superar esas pruebas, insisto, normalmente, aun las acrecenta más, las intensifica y alimenta sin piedad a nuestros demonios internos más perversos y destructivos.

No podemos dejarnos avasallar por las personas malévolas de nuestro alrededor. No podemos ni debemos cederles nuestro poder. Hay que seguir adelante, enfrentarse a quien sea necesario y continuar con nuestras metas y labores hacia un mundo mejor. Si las buenas personas nos escondemos, arrinconamos y nos silenciamos vamos a dejar todas las parcelas mundanas importantes en manos de los psicópatas y narcisistas que harán de esta tierra un lugar terrible, un autentico infierno que por desgracia ya han creado en muchas partes de nuestra geografía mundial. ¿Acaso vamos a permitir que esto siga así?

Yo comprendo que muchas personas pensarán que nada podemos hacer individualmente las personas de a pie para mejorar situaciones tan brutales como la guerra o el hambre en el mundo, pero quiero que piensen en esto: Solo con que ayudes a una sola persona que lo necesite ya estas cambiando un mundo entero, el suyo. De la misma forma que puedes ayudar a un animal que lo necesite, o puedes hacer algo positivo por tu comunidad aportando valores como tu tiempo, tus ideas, tu cariño o tus destrezas personales.

Estamos rodeados de personas que sufren, seguro que algo podemos hacer para aligerar sus respectivas cargas. Desgraciadamente los malévolos del mundo no están parados ni un segundo, al contrario, son muy activos y encuentran infinitas formas de infligir dolor y sufrimiento a otros, ¿Acaso nosotros no seremos capaces de contrarrestar estas barbaries encontrando y aplicando formas de sanar y consolar a las personas de nuestro alrededor? Yo creo que sí.

Sigamos andando siempre, que no nos pare ninguna caída por más dura que sea, recuperemonos y sigamos caminando de nuevo. Cada paso dado por pequeño que sea ya es un avance. La constancia trae grandes recompensas y la vida no esta hecha para dejarla pasar sin más, sino para vivirla con pasión construyendo un presente mejor para todos.

Atte. Sonia López

Comentarios

Entradas populares